Ventajas y desventajas de las fachadas ventiladas
La necesidad de rehabilitar la fachada de un edificio suele deberse a la aparición de humedades por un mal aislamiento, gran pérdida de energía, deterioro del revestimiento de la fachada.
La fachada ventilada es un sistema constructivo de cerramiento exterior constituido por una hoja interior, una capa aislante, y una hoja exterior no estanca. Este tipo de fachada permite acabados duraderos y de gran calidad, y ofrece excelentes prestaciones térmicas.
Los Sistemas de fachadas ventiladas proporcionan al edificio a rehabilitar aislamiento continuo, confort acústico, eliminación de puentes térmicos, filtraciones y condensaciones, mínimo mantenimiento de la fachada por la baja absorción del Gres porcelanico, una importante reducción del consumo de energía de más de un 30-40%, con un coste de mantenimiento nulo, resistente al paso del tiempo. Se aplica directamente sobre la vieja estructura facilitando una obra sin escombros.
La actuación en el edificio se produce por el exterior, evitando así problemas a los vecinos en el interior de sus casas.
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